«Los procesos mentales se dividen en dos tipos: los automáticos y los procesos controlados, que exigen un control continuo sobre ellos. Justamente son éstos los que consumen energía», explica el especialista. «Esto ocurre porque la parte del cerebro responsable de la toma de decisiones son los lóbulos frontales. Son las estructuras más complejas que tenemos en el … Leer más