Se trata de una de las consecuencias más claras y directas tras descubrirse la existencia de una red de reseñas falsas compuesta por más de 200.000 personas que inflaban artificialmente la valoración de los productos mediante reseñas falsas que escribían a cambio de dinero o pagos en especie en forma de objetos.
La principal de ellas era Aukey, una marca china que vendía dispositivos electrónicos y accesorios a precios muy bajos. Sus productos cuentan con diseños muy parecidos a otros de grandes marcas como Apple, como sus auriculares inspirados en los AirPods y los AirPods Pro.